miércoles, 19 de mayo de 2010

Tú estabas en mi clase

¿No les ha pasado alguna vez que miran a otra persona de su misma edad y piensan que seguramente yo no puedo parecer tan vieja.?
Bueno, lean esta historia:
Mi nombre es Maria Garcia y estaba sentada en la sala de espera del dentista para mi primera consulta con él. En la pared estaba colgado su diploma, con su nombre completo.
De repente, recordé a un muchacho alto, buen mozo, pelo negro, que tenía el mismo nombre, y que estaba en mi clase del Instituto, como 30 años atrás.
¿Podría ser el mismo chico por el cual yo estaba secretamente enamorada?
Pero después de verlo en el consultorio, rápidamente deseché esos pensamientos. Era un hombre pelado, canoso, y su cara estaba llena de arrugas, y lucía muy viejo como para haber sido mi compañero de clase.
Despúes que examinó mis dientes, le pregunté si se había graduado en el Instituto de nuestra ciudad.
- ¡Sí, Sí! Sonrió con orgullo.
Le pregunté:
- ¿Cuándo te graduaste?
- En 1980. ¿Por qué me lo preguntas?
Y yo le dije:
- ¡Tú estabas en mi clase!
El me miró detenidamente...
Y entonces, ese feo, calvo, arrugado, gordo, canoso decrépito hijo de... va y me pregunta:
- Y usted, ¿de qué era profesora?

1 comentario:

Belén dijo...

jajajajajajajaja
muy bueno!!!